El concepto de “Comunidad Educativa”, si bien ha sido muy utilizado
en los últimos años, no es nuevo, desde la aparición de las primeras
escuelas institucionalizadas se ha realizado trabajo de apoyo a la labor
escolar por parte de los miembros de las comunidades. Es así, como
la participación de la comunidad próxima a los centros educativos ha
estado muy involucrada en la buena marcha de éstos. Los padres
de familia y la gente interesada en el mejoramiento de sus comunidades se integraban a tareas ligadas al desarrollo de sus escuelas.
Esto nos permite señalar que la escuela siempre ha sido considerada
parte importante de la comunidad y por ello ha tenido un sentido de
pertenencia.
Generalmente esta relación del centro con la comunidad se ha
visualizado como algo que se debe dar “per se”, y así lo hemos visto
comúnmente, el padre o madre de familia se relaciona con el maestro,
la escuela y los demás estamentos en forma espontánea y continua;
pero para obtener el mayor beneficio, se requiere de la participación
organizada, formal, que involucre responsabilidades, compromisos,
tareas, funciones, de manera que el trabajo que se realiza sea más
directo y se muestre en acciones concretas, que es el propósito de
las comunidades educativas debidamente organizadas.
Tenemos, entonces, que la comunidad educativa institucionalizada y
la utilización del concepto como tal, sí es muy reciente. Al respecto, el
sociólogo Cecilio de Lora, citado por Arizmendi Posada (1971:14)
señala “…es necesario que el centro educativo se organice como
auténtica comunidad escolar. Esto implica que todos los elementos del
centro se integren de forma orgánica: el rector, los profesores, los
alumnos, los padres de familia y los responsables de la comunidad”.
Esto debe ser así, porque la escuela, como señala Sánchez (2005),
no es una isla en la sociedad, ni el maestro es un especialista
encerrado en las paredes del aula y fuera del alcance de toda
influencia exterior, pues tiene que estar en constante interacción con
los padres y los representantes de la comunidad, por ello la escuela se
transforma espontánea y progresivamente en uno de los núcleos
vitales de la sociedad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario